Como explicar esta sensación de que una vez que se empieza a escribir se transforma en una adicción. Que con la cabeza llena de ideas, de flores, de burbujas, a cualquiera se le revoluciona el corazón.

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lunes, 26 de marzo de 2012

Decime que es lo que hago
para aliviarte esta pena,
para dejar de llorar
y verte feliz y abierta a la magia
de esta vida de grandes miserias
y grandes ilusiones
donde sólo uno es quien escoge
si morir de alegría o de dolor.
Donde hay tantas razones
y tantas causas
y tanta cosa buena
que no me dan los sentidos para disfrutarlas
para aprehenderlas y desarmarlas
para gastarme en la alegría
de sentirme dueña
de tanta hermosura 
y tanta tristeza,
tanta cosa suelta,
pero siempre mía
y siempre dueña plena.

jueves, 15 de marzo de 2012


A quien dar estas piernas y estas formas,
cuando haga la limpieza de conciencia,
cuando cambie mi personalidad de manera completita
y no me quede ni un espacio de miedo,
donde no quepa esta esencia,
y este alma lastimada.

A quien dar todo esto,
toda esta vida y esta carencia,
y estos ojos,
y esta boca,
y mi tristeza,
donde van a ir a parar?

miércoles, 7 de marzo de 2012


Vos te esmerás porque todo sea perfecto,
y vivís en la cuerda floja,
buscando un punto de equilibrio que jamás vas a lograr.
Porque la seguridad,
esa eterna utopía,
solo está en tu cabeza.
Sos vos la cuerda,
y la mano que la maneja.
Sos vos quien te sostiene,
y en el momento exacto te dejás caer,
sobre unas manos que creés seguras.

Que por las noches,
llorás desconsolada,
porque la gente no te quiere,
de la manera en que vos querés que te quieran.
Porque el invierno es tan frío,
y la primavera tan cálida,
y el verano tan caliente,
y el otoño tan triste,
y vos tan inconforme,
y tan solitaria,
que nada es como debería ser.

Y nadie cambia nada,
y tu perfección es tan imperfecta,
que te volvés una guaranga,
gritando improperios a la gente que pasa,
porque no usan los sombreros que deberían,
y su ropa no combina.
Porque vos estás tan sola,
y la cuerda tan floja,
que tambalea tu cordura,
acercándote a la imperfección ideal,
la de la seguridad propia.

lunes, 5 de marzo de 2012

 no quiero que me analices, para eso voy a otro lado, y no me vengas contupsicologíabaratadeCoelho y salvemosalmundo queestánfácilserfeliz, cuando sé que me doy vuelta y te pasas la vida llorando.
Y no, no estoy deprimida, no me vengas con pelotudeces si te dije que el psicoanálisis te lo metas bien por lo hondo, si es que algo de profundidad hay en vos y no sos más que lo que yo sospecho, algo flotando en la superficie y que jamás va más allá. No estoy deprimida no, es otro cosa, un odio ciego o la certeza de que hay algo más allá, algo que ver y sentir y que no estoy alcanzando, algo que jamás voy a poder ver porque yo también soy un bicho de superficie; porque todos tenemos profundidades en las que no podemos entrar nunca a menos que aprendamos a bucear. Y bucear me da tanto miedo, no vaya a ser que me hunda y no quiera salir ya más.